Juntos, enamorados y felices
Un día mi pastor me dijo: “las mismas energías que le dedicas a tu ministerio: preparar sermones y enseñanzas, planear, dirigir la iglesia, aconsejar, viajar etc. Le debes dedicar a tu matrimonio. Si tu matrimonio está bien, todo lo demás estará bien y por mas tiempo. Tu matrimonio es tu trabajo.”
Nunca me olvidaré de ese consejo que me ha ayudado a permanecer sirviendo, pero sobre todo a permanecer casado, enamorado y feliz al lado de mi esposa.
Proverbios 18:22 NTV 22 El hombre que halla esposa encuentra un tesoro, y recibe el favor del Señor.
Eclesiastés 4:9-12 9 Mejor son dos que uno, pues reciben mejor paga por su trabajo. 10 Porque si caen, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del que está solo! Cuando caiga no habrá otro que lo levante. 11 También, si dos duermen juntos se calientan mutuamente, pero ¿cómo se calentará uno solo? 12 A uno que prevalece contra otro, dos lo resisten, pues cordón de tres dobleces no se rompe pronto.
Tienes una esposa, cuídala, amala, sírvela, atiéndela.
NO hay forma de imaginar mi vida sin la compañía el apoyo, el impulso y el amor de mi esposa Laura.
Te amo Lau, Gracias a Dios por tu vida. Contigo todo, sin ti nada.